Sexto Centenario de la proclamación de Santa Eufemia como pAtrona de Antequera

El 29 de enero de 2010 pasará a la efemérides antequerana como el día en el que Antonio Montiel pintó en el escenario del Teatro Torcal, el retrato de la historia procesional y cofrade de los 600 años de Antequera, dentro de la Exaltación Cofrade en el Sexto Centenario.

Se trataba de un acto organizado por las comisiones del 2010 del Ayuntamiento y de Santa Eufemia, cuya entrada, 5 euros, se destinó a la Fundación Prolibertas, de los trinitarios de Antequera. Tras el desastre del terremoto de Haití, ellos optaron por destinar los fondos para reconstruir un hospital. A los casi 2.000 euros de las localidades, se han venido sumando donativos de la campaña con la fila cero que rondan ya los 6.000 euros.

Durante la exaltación, salieron representantes de las cofradías con sus vestimentas peculiares.

Había expectación por presenciar la puesta en escena que Montiel siempre organiza en sus actos, y más aún al saber que era dedicado no sólo a la Semana Santa, sino también al Sexto Centenario y a las cofradías de Gloria. Y, como los presentes apuntaron a su término, se quedaron maravillados por la representación, la suma de contenidos históricos, cofrades, religiosos, antequeranos, que se pudo disfrutar el viernes 29 de enero.

l acto comenzó a las 21,04 horas. Sólo 17 entradas no se vendieron para haber llenado el Teatro Municipal Torcal. La gente que no pudo ir, cooperó con la fila cero, que aún siguió recibiendo aportaciones los días siguientes del mismo.

Nuestro director Ángel Guerrero Fernández condujo las intervenciones iniciales. Tras el saludo, dio la palabra al alcalde Ricardo Millán, quien dijo que tras la recolocación del Pendón en la parte alta de la ciudad, éste se trataba del primer acto oficial de la comisión del Ayuntamiento, y uno más en colaboración con la de Santa Eufemia.

Seguidamente, el padre Antonio Aurelio, por los trinitarios, dio las gracias a los organizadores y a todas las personas que, asistiendo o colaborando en la fila cero, iban a hacer posible la reconstrucción de un hospital en Haití, por parte de la Fundación Prolibertas.

De nuevo tomó la palabra Ángel Guerrero, quien presentó a Antonio Montiel. Destacó que se trata de un hijo de la tierra que no renuncia a pregonar que nació en Antequera allá por donde vaya. Recorrió sus éxitos pictóricos con sus retratos, siendo uno de los más cotizados hoy día, así como de los más destacados en personajes reales, recordó la muestra de famosos de la revista "Lecturas", así como sus pregones de Santa Eufemia y la Real Feria de Agosto, además de los retratos de la Patrona, el Señor de la Salud y de las Aguas y la Real Feria de Agosto.

David Gutiérrez llevó a la perfección la Banda Municipal de Música de Álora.

llegó la hora esperada, la salida del pregonero. El escenario del Teatro Municipal estaba decorado por una cruz y dos ciriales de la Cofradía de la Soledad en una esquina, y un atril el otro. El telón estaba bajado y se subía cada vez que la Banda de Música de Álora interpretaba algún tema, magníficamente dirigida por el joven antequerano David Gutiérrez, quien alzó su batuta con el tema con aire medieval "Metkub", a cuyo término salió Montiel, recibido por una fuerte ovación.

Empezó agradeciendo que él fuera el encargado de esta exaltación en el año tan importante para Antequera, tras 5 años sin estar en un acto público en nuestra ciudad, tras su Cartel y Pregón de la Real Feria de Agosto de 2005.

Luego quiso aclarar que no se trata de una competencia al Pregón de la Semana Santa (que le hubiera gustado pregonar, pero que la Agrupación no lo estimó conveniente para este año, dejando una puerta abierta para el futuro), sino un acto distinto, abarcando el Sexto Centenario, las cofradías de Gloria y la historia del Infante don Fernando.

José Antonio Morales sorprendió por su capacidad de acompañar con diferentes ritmos las palabras de Montiel.

Siguió recordando la presentación del Cartel de Santa Eufemia de 2004, momento en el que comenzó José Antonio Morales a acompañarle al piano, siendo muy destacada la búsqueda de temas acordes con su discurso.

Tras la introducción, el tema de Álora de "Estrella Sublime" dio pie al inicio de la narración de la exaltación. Montiel aludió a García de Yegros, Juan Manuel Moreno y Eugenia Acedo, para recordar cómo fue la conquista el 16 de septiembre de 1410, las elecciones de alcaide, escudo y Patrona. Destacó la presencia de la Virgen de la Esperanza (hoy en San Sebastián) y del Cristo de Antequera (en Toledo), junto a obispos y demás, como la primera de las procesiones de la Antequera moderna.

Rosa Miranda es la voz más angelical de la Antequera del 2010.

Seguidamente, lamentó que el Quinto Centenario pasara desapercibido, por lo que pidió a todos los antequeranos que se unieran para celebrar por todo lo acto el 2010. Puso como ejemplo a él, exponiendo que preguntó qué podía hacer, a lo que dijo que se encargaría de retratar la Antequera del Sexto Centenario, pero con sus palabras, y no en un lienzo, sino en el Teatro Torcal. Para ello, desde el primer momento, contó con una proyección de 182 fotografías que se fueron presentando en la pantalla del cine.

Tras unos versos al Niño Jesús, salió Rosa Miranda, con mantilla negra, evocando a las Dolorosas castellanas, en la que deleitó a todos con su primera aportación musical. Y sería el momento en el que el pregonero describió el surgimiento de las cofradías como forma de llevar la catequesis de los retablos de las iglesias a las calles. Enumeró los apellidos cofrades de los últimos siglos, gesto que fue muy agradecido por los presentes, en el momento en el que la banda tocó "Jesús Preso".

Montiel comenzó a describir el año cofrade, desde el día del Dulce Nombre de Jesús hasta la festividad de la Virgen de la Consolación y Esperanza. Entre tanto, tuvo especial parada en la Semana Santa, en cuyas primeras palabras, salió Javier Subires y rezó una saeta por el Sexto Centenario, dedicada al Señor del Rescate. Luego, antes de la Pasión del Viernes Santo, el joven Subires que sorprendió por su interpretación, se entendió a la perfección con Montiel y Morales, exponiendo el sentimiento cofrade con La Saeta de Serrat, basada en los versos de Machado.

El joven cantaor Javier Subires sorprendió con sus dos saetas.

Si alguien dudaba del compromiso cristiano del pregonero, lo dejó muy claro a la hora de evocar la Resurrección. A su término, la Banda comenzó interpretando "Nuestro Padre Jesús" y salieron al escenario representantes de las cofradías de Los Estudiantes, Rescate, Consuelo, Dolores, Paz, Socorro, Soledad, Rocío, Señor de la Salud y de las Aguas, Santa Eufemia y Rosario, portando túnicas de hermanaco, hermanos mayores de insignia, mantilla, maceros, acólitos, directivos y faroles, siendo un homenaje que Montiel quiso hacer al Domingo de Resurrección, parte fundamental de los cristianos.

Seguidamente, siguió con las procesiones de Gloria (entre tanto, Rosa Miranda, salió de nuevo, esta vez de blanco, interpretando el "Ave María" de Schubert). Y el artista se paró en el mes de septiembre, el mes de las patronas, con el tema "Concha" de la Banda de Álora. Tuvo especial hincapié en los actos previsto para el 16 de septiembre de 1410. Alentó a la ciudad a seguir y acompañar en los actos que se organicen y desarrollen con motivo del culmen del Sexto Centenario, en torno al jueves 16 de septiembre, fiesta local.

Y terminó con esta poesía:

"Antequera, mi Antequera

la del VI Centenario

la que vuelve a recordar

al Infante Don Fernando

a Rodrigo de Narváez

alcaide de esta ciudad

y a los católicos reyes

que trajeron cristiandad.

Y como culmen de todo

nuestras voces se alzarán,

Santa Eufemia desde el cielo

también lo compartirá

junto al Señor de las Aguas,

Los Remedios y muchos más,

con su pueblo antequerano

que de nuevo exaltará

la frase ya conocida

por toda la humanidad:

¡Salga el Sol por Antequera

y que sea lo que Dios quiera!

Fue ovacionado por varios minutos, y al finalizar, le tuvieron cerca de media hora en el teatro para darle le enhorabuena. Desde allí, se trasladaron al Hotel Antequera Golf, patrocinador del acto, donde hubo un aperitivo y un detalle para los organizadores del acto solidario.

Sin duda, un acto para no olvidar y tenerlo en cuenta cuando resumamos los actos más destacados del Sexto Centenario. Y también, para poder presumir y decir: "Yo fui uno de los privilegiados que estuvo en vivo en la Exaltación Cofrade de Antonio Montiel".

Al término del acto, el Antequera Golf ofreció un ágape a los protagonistas, donde el alcalde Ricardo Millán entregó un pequeño obsequio.