Sexto centenario. 1410-2010
La Cofradía del Mayor Dolor vivió una noche de Miércoles Santo marcada por la salida al anochecer, el estreno de la doble canastilla del Señor, el nuevo palio de la Virgen, la llegada a Santa Eufemia y el paso por el Barrio de San Pedro.
Desfile de la Armadilla a las 20 horas desde el Hotel Las Villas. Oración previa en el interior de la iglesia, dirigida por el capellán y párroco padre Antonio Ramos Ayala, a todo el cuerpo procesional. Primero salía el Señor del Mayor Dolor, por la puerta principal, con la estampa del cielo azul, a las 20,47 horas. Y luego, la Virgen del Mayor Dolor, por la puerta de la calle Encarnación.
Además, fue una salida ligera, ya que se agilizó la colocación de las andas y el "arriba" de los tronos. María Trinidad Calvo Gómez, vestida con mantilla española, al igual que el resto de directivas en el guión presidencial, acompañada por la teniente de alcalde Carmen Rosa Torres Varo, el padre Mundina, el congresista y concejal Ángel González, la pregonera de la Semana Santa Carmen González, así como otras autoridades y representantes de las cofradías.
A las 21,20 horas, partía la procesión por calle Encarnación abajo. La abría la Banda de Guerra de la Brigada de La Legión "Rey Alfonso XIII" con sede en Almería. Seguía el estandarte de la Cofradía, el guión presidencial, penitentes con túnica y capuz negros y cinto de esparto (que este año agotaron los portacirios previstos), acólitos de monaguillo, hermanacos y con dalmática, y el trono del Señor. Su camarera Teresa Jiménez Aragón, con la colaboración de Enrique Cruces, preparó el trono con flores a base de rosas crema, iris azules, alstromerias amarillas, fresias y flor de cera blanca. El Señor estrenaba la segunda canastilla, realizada en madera por Bartolomé García Pérez, que realzó la efigie del Señor quien daba su bendición son su mano al paso por las calles de Antequera. Por la nueva composición del trono, se sustituyeron los faroles de las esquinas por los antiguos candelabros de brazos. Jesús Díez de los Ríos Fuentes se estrenaba al frente de sus 66 hermanacos con túnicas y capuces negros con cinto de esparto. Él también llevaba por primera vez una túnica de terciopelo negro, con bordados y encajes antiguos, confeccionada por María Zapata y Trinidad Calvo. Fueron a la carrerilla. Tras el Señor, escolta legionaria y decenas de devotos alumbrando la imagen del Señor.
A continuación, más penitentes, acólitos con dalmática y el trono de la Virgen del Mayor Dolor, mecido en gran parte del recorrido. Su camarera, María Trinidad Calvo Gómez, decoró el trono con palio de nuevo, con la ayuda de Miguel Herrera de Arte Floral, a base de hortensias en el frontal, rosas, rosas de pitiminí, boris, camelias, magnolio, alstromerias, fresias, clavel, amarilis y alhelíes. José Romero Benítez colocó a la perfección el rostrillo de la Virgen, y María Zapata el manto. Lució nueva corona, cedida por el devoto Alfonso Muñoz Díaz, de plata, realizada en México e inspirada en la de la Coronación de la Virgen del Socorro. Estrenó las tallas del techo de palio, realizadas por Bartolomé García, así como el nuevo palio, acoplado y confeccionado por María Zapata. Andrés Calvo Ruiz dirigió a sus 64 hermanacos. Tras la Virgen, la Banda de Música de Huétor Vega,con buena actuación.
La procesión prosiguió por la Carrera de Madre Carmen hasta llegar a la Plaza de Santiago. Allí, la representación oficial aguardó la llegada de los dos tronos, que se "encontraron" con Santa Eufemia en su templo, donde esperaba el guión y una representación de la hermandad patronal. Al parar en la puerta, las monjas Mínimas rezaron cantando a las dos imágenes. Una vez llegó la Virgen del Mayor Dolor, el párroco padre Antonio Ramos Ayala, rezó en la puerta la oración a Santa Eufemia. Luego entró al templo, implorando ante el Santísimo y la imagen patronal. En ese momento, la Directiva entregó a la hermana mayor de Santa Eufemia, Lorena Sánchez del Río, un cuadro conmemorativo de la visita extraordinaria que se colocó a los pies de la imagen.
Desde allí la procesión pasó por primera vez por la calle San Pedro, concurridísima de vecinos, tanto en las aceras como en los balcones, algo nunca visto. Al llegar a las puertas de la iglesia parroquial, una representación de la Cofradía del Consuelo entregó un cuadro conmemorativo al llegar el Señor del Mayor Dolor. Y pasaron por Cruz Blanca, Lucena, hasta llegar a Madre de Dios y Cantareros, con más gente que nunca. Entraron hasta con 15 minutos de adelanto al recorrido oficial en la calle Infante don Fernando.
Y llegó la hora del final, en la que los dos tronos fueron juntos desde San Agustín hasta Bouderé, sin poder entrar unidos a San Sebastián, por los andamios colocados en una de las aceras. Así, entró primero el Señor por la puerta principal y la Virgen por la puerta de la calle Encarnación, dándose por terminada la misma a las 2 de la madrugada, en un día histórico la vivida por la Cofradía del Mayor Dolor en el año del 2010.
El Señor del Mayor Dolor ante la puerta de la iglesia de Santa Eufemia.